viernes, 19 de octubre de 2012

De Rota a Morón y tiro porque me toca a Gibraltar (en 27 jugadas)


De oca a oca y tiro porque me toca… era una frase que, alegres, canturreábamos de niños cuando jugábamos al juego de la oca. Si te tocaba en la casilla de una oca estabas de suerte y tu ficha avanzaba pletórica por el laberinto que conducía a la figura del centro, un pequeño lago con ocas y un paisaje idílico de fondo.

Hace mucho tiempo que no juego a la oca. Ahora, cada año, voy a las Marchas contra las bases de Rota, Morón y Gibraltar. Porque en mi vida de adulto ya no hay ocas, sino esas tres orcas -con capacidad nuclear- que devoran ocas. En mi vida de adulto ya no hay paisaje idílico, sino escudo antimisiles, submarinos atómicos, aviones estratégicos Galaxy zumbando continuamente por el cielo de Jerez camino de Rota, baterías de misiles en la costa de Cádiz, grandes radares en el Pico del Montero (Alcalá de los Gazules), maniobras, llegadas de buques que vienen de Somalia, etc. Cádiz es un laberinto de instalaciones militares, un espinoso tablero cuyo centro está ocupado desde hace mucho por la ponzoñosa casilla de la guerra (perdón, intervenciones humanitarias he querido decir). En mi vida de adulto hay momentos de Paz, sí, pero turbados continuamente por escenas militares que se despliegan incansablemente ante mis ojos.


De orca en orca, año a año, aunque cansado, voy hablando de que la estrategia nuclear es, además de una inhumanidad, un crimen genocida, una realidad militar que debe ser contestada con la máxima energía ética de la que dispongamos. Andalucía, la tierra de la Paz, del cruce de culturas, de la alegría vitalista, Andalucía, la tierra de la fiesta y la luz, la tierra acogedora, humilde, que comparte un trozo de pan con quien sea, donde nadie es extranjero… llena de instalaciones nucleares. Mi tablero de la oca convertido en un auténtico campo de minas (atómicas).






Lloro. Me estremezco muy profundamente. Mi indignación no tiene límites.

Pero, por supuesto, vuelvo a la calma (como buenamente puedo) y me dispongo a continuar luchando en organizaciones llenas de gente consciente, crítica y noble (como la R.A.N.A., o CGT, o Ecologistas en Acción).

Así que este año ya estas organizaciones, y otras, han convocado la XXVII Marchas contra las Bases. Su manifiesto puede leerse aquí: http://redantimilitarista.wordpress.com/2012/10/15/xxviia-marchas-contra-las-bases-militares/ Y es por ello que quisiera hacer, después de leer el comunicado de los convocantes, su síntesis en 10 mensajes claros:

1º.- Ante las 3 bases con capacidad nuclear, seguimos diciendo: GASTOS MILITARES PARA ESCUELAS Y HOSPITALES. OTAN no, empleo y vivienda sí.

2º.- Lo que estamos sufriendo es un golpe de estado social y económico, una GUERRA SOCIAL organizada por la Unión Europea, el Banco Central Europeo, El Fondo Monetario Internacional, etc.
3º.- No al estado de represión policial hacia el interior y NO a las “intervenciones humanitarias” contra el exterior (Irak, Libia, etc.)

4º.- El causante de los problemas: un “programa capitalista, antiecológico e inhumano” disfrazado de defensa de la democracia y de los derechos humanos.
5º.- NO al militarismo creciente del gobierno español: instalación en Rota del peligroso escudo antimisiles, un ministro de “Defensa” que es un empleado de las fábricas de armas, 18.000 millones de euros anuales en gasto militar, atraque de buques nucleares en Rota y Gibraltar, prórroga del tratado militar con EE.UU., etc.

6º.- Andalucía no debe seguir siendo un gran y sofisticado portaviones de la OTAN concebido para operar sobre el Mediterráneo, África y Oriente Medio.

7º.- El Movimiento por la Paz de Andalucía saluda los nuevos aires de libertad en el mundo árabe.

8º.- Resistencia social y desobediencia civil frente a los causantes de la crisis, insistiendo en el despilfarro de los gastos militares y la inhumanidad de las guerras.

9º.- Exigencia de políticas concretas de Desarme y Cooperación Internacional hacia una Cultura de Paz.

10º.- Desmantelamiento de las bases de Rota, Morón y Gibraltar, pues es aquí donde se organizan y empiezan las guerras.
Por lo que a mí se refiere, yo voy a seguir acudiendo a estas movilizaciones del Movimiento por la Paz de Andalucía porque, por encima de todo, no puedo admitir que algunas personas (completamente enloquecidas) pongan en juego la vida de millones de seres humanos  a base de sembrar el planeta de armas atómicas. La estrategia nuclear que se practica desde Rota, Morón y Gibraltar, es un crimen contra la humanidad. Y es imposible mirar hacia otro lado cuando esto ocurre al pie de nuestras casas. Nunca los andaluces y las andaluzas dejaremos de luchar para que todas y cada una de las armas de destrucción masiva sean abolidas y sus creadores, impulsores y quienes las usan políticamente para imponer sus intereses en el mundo queden justamente procesados ante tribunales internacionales.

No lo pone en el documento de los convocantes (y quizás debería ponerlo), pero pienso que haber dado el Premio Nobel de la Paz a quienes detentan inmensos arsenales de poder atómico (como Barak Obama o la Unión Europea) no solo es el colmo del cinismo, sino la señal clara de hasta qué punto, hoy más que nunca, es totalmente necesario que la ciudadanía, no los gobiernos sostenedores de la estrategia nuclear, sea quien lidere la lucha por la Paz y el Desarme en el mundo.


A quien haya tenido la paciencia de leer este emotivo texto le digo: vamos juntos a las Marchas a Rota, Morón y Gibraltar; que la Paz no sea el juego de las orcas
+++++++++++
[pido disculpas por usar la voracidad de las orcas como metáfora para referirme al peligro nuclear militar, cuando en realidad estos animales no tienen nada que ver con la capacidad genocida de algunos seres humanos]